El socialista Indalecio Prieto (1883-1962), quien además de ministro y diputado fue concejal del Ayuntamiento de Bilbao, ha sido homenajeado hoy en esta corporación municipal con la entrega del PSE-EE al alcalde, Iñaki Azkuna, de un busto del político. El portavoz del PSE-EE en el Ayuntamiento, Alfonso Gil, ha entregado la escultura al alcalde en un acto con el que los socialistas han cerrado la conmemoración del 50º aniversario de la muerte de Indalecio Prieto.
Tras recibir la escultura, en bronce, obra de Juan Cristóbal, Azkuna (PNV) ha explicado que la va a colocar en su despacho, junto a las del poeta Blas de Otero, el lehendakari José Antonio Agirre y el escritor Miguel de Unamuno, entre otras personalidades «de todos los calibres y cofradías» que decoran su lugar de trabajo.
El alcalde ha destacado que don Inda fue en su momento «el gran baluarte del socialismo, no sólo en Bizkaia sino en España», y ha resaltado que Prieto y Agirre fueron «los mentores y hacedores» del primer Estatuto de autonomía vasco, en 1936.
Al acto han asistido, junto a representantes de los cuatro partidos con presencia en el Ayuntamiento de Bilbao (PNV, Bildu, PP y PSE-EE), exconcejales socialistas como Teo Uriarte, Dimas Sañudo y Txema Oleaga, y miembros del PSE, como José Antonio Pastor e Idoia Mendia. Han acudido también el exsecretario general de UGT Nicolás Redondo, y las representantes de las fundaciones Ramón Rubial y Sabino Arana.
Gil ha recordado que Indalecio Prieto, aunque nació en Oviedo, fue «bilbaíno de adopción y devoción» y ha destacado que como ministro de la Segunda República «impulsó la regeneración urbanística de Bilbao y su área metropolitana». Teniente alcalde y concejal de Bilbao entre 1916 y 1918, y diputado en el Congreso por la capital vizcaína en siete legislaturas, Indalecio Prieto confesó que le hubiera gustado acabar su vida política como empezó, pero no pudo regresar a esta ciudad ya que murió en el exilio, en México, en 1962.
Tras el visionado de un vídeo con imágenes de Prieto y otros dirigentes de la época, ha tomado la palabra el portavoz socialista municipal, Alfonso Gil, quien ha recordado que, pese a haber nacido en Oviedo, el política socialista fue un bilbaíno «de adopción y devoción», que «amó profundamente a esta ciudad».
«Como socialista se sintió profundamente identificado con la tradición liberal de esta villa. Aquí, en Bilbao, dijo aquello de que era socialista porque era liberal, ya que el socialismo era, en su pensamiento, el sostén más eficaz que puede tener la libertad», ha agregado.
Gil ha recordado, asimismo, que el exministro de la República impulsó la regeneración urbanística de la villa y su área metropolitana, con proyectos de enlaces ferroviarios, junto a «su buen amigo» el arquitecto Ricardo Bastida.
Además, ha recordado, al igual que ha hecho Azkuna, que Prieto tuvo una contribución «decisiva» para la aprobación del primer estatuto de autonomía, así como para la formación del primer Gobierno vasco, en octubre de 1936, liderado por el primer lehendakari, José Antonio Aguirre.
Por su parte, el alcalde de Bilbao ha afirmado que «Don Inda» fue el «gran baluarte» del socialismo, «no sólo en Bizkaia», ya que protagonizó una «corriente importantísima» en el Estado junto a Besteiro y Largo Caballero. «Ellos fueron los tres grandes espadas del socialismo español», ha señalado.
NEGRÍN Y AGUIRRE
Tras recordar diversos episodios de Prieto con el expresidente de la II República, Juan Negrín, Azkuna ha ensalzado la labor realizada por Prieto y José Antonio Aguirre a la hora de «amalgamar» el estatuto vasco, aprobado en plena Guerra Civil española.
Por último, ha recordado su amistad con Ricardo Bastida, un católico «de comunión diaria», que según Azkuna pretendía «convertir» a Prieto, el cual le respondió en unas cartas «extraordinarias», en las que «le daba unos pases toreros, por la izquierda y la derecha, impresionantes».